sábado, 23 de noviembre de 2013

LA UNIFICACIÓN ITALIANA



Desde Verdi y su ópera Nabuco se crea una conciencia unificadora que cristaliza en una corriente neogüelfa que tiene su propia fórmula en el abate Gioberti Del primado moral y civil de los italianos, publicado en 1843, quien sostiene la existencia de una raza italiana. No habla del obstáculo de Austria pero si de ka importancia del pape que debe jugar Francia en la unificación. Quien si se preocupa de la presencia austriaca es Cesare Balbo en Esperanzas de Italia, de 1844. Massimo D’Azzeglio en Programa para una opinión nacional, de 1846, apoya un proceso unificador armado desde la dirección del Piamonte. Mazzini considera que los dos principales obstáculos para la unificación son la resistencia de los soberanos y los particularismos locales que solo serán superados por la República Italiana.
El mapa preunitario que presenta la península itálicaes complejo. Desde el Congreso de Viena queda dividida en siete estados: Piamonte, Lobardo-Véneto, Parma, Módena, Toscana, Estados Pontificios y el Reino de las Dos Sicilias. La consecuencia fundamental de esta fragmentación es la preponderancia austriaca presente en Lombardo-Véneto y el Reino de las Dos Sicilias. Los Estados Pontificios dividen un norte industrializado, sobre todo desde el Piamonte, de un sur agrario y tradicional.
La figura de Camilo Benso, Conde de Cavour, será fundamental para comprender el proceso aglutinador. En su figure se unen los sentimientos monárquicos con sus conocimientos sobre la estructura económica de Italia. Figura máxima del Risorgimento su actividad se puede resumir en tres ámbitos: a) político, considerando al Piamonte como protagonista del proceso y apoyándose en personajes de gran carisma social como Garibaldi; b) diplomático, consciente de la necesidad de apoyo exterior se ve obligado a apoyarse en Francia, a pesar de los vaivenes de la política exterior francesa; c) económico, tratando de estructurar un modelo ecnómico desde el norte que permita articular un estado propio y unido, del mismo modo que el Zollverein le sirvió a Alemania. En el plano diplomático, la intervención del Piamonte en la guerra de Crimea plantea por primera vez el problema de Italia y será el pistoletazo de salida hacia el proceso político y militar.
La contrafigura será Garibaldi. Filibustero, revolucionario de barricada, capaz de arrastrar a las masas por su gran carisma y su oratoria apasionada defiende el republicanismo italiano y adquiere una inmensa popularidad.
Fases de la unificación:
1ª fase: la Guerra de 1848:
Desde 1832 Mazzini funda la Giove Italia como base del movimiento nacionalista que inicia esta guerra. El conflicto estalla cuando Metternich invade Ferrara en 1847 y en 1848 se produce el levantamiento de los milaneses que desencadena en una insurrección general. Manin proclama la república de Venecia. Piamonte, mientras, se retrasa en la intervención y Mazzini disuelve la Giove Italia y crea la Asociación Nacional Italiana. Al mismo tiempo Garibaldi regresa de su exilio uruguayo y ofrece sus servicios al Rey del Piamonte Carlos Alberto. Desde Nápoles y Toscana se envían tropas a Venecia para ayudar a la nueva república y se proclama a Carlos Alberto rey de Italia. El general austriaco Radetzky derrota a las tropas piamontesas en Custozza y obliga a Carlos Alberto a firmar un armisticio, ocupando Milán. Al mismo tiempo en Roma se produce una revolución que expulsa al Papa y la intervención extranjera en favor del Pontífice derrota a Carlos Alberto en Novara y es obligado a abdicar en la persona de su hijo Victor Manuel. En 1849 Francia entra en Roma y en 1850 regresa el Papa. Venecia, asediada cae en 1849. El ’48 se cierra como un primer intento frustrado y el nuevo dirigente piamontés, Cavour se da cuenta de la necesidad de apoyo de una potencia extranjera para apoyar las aspiraciones unitarias y decide intervenir en la Guerra de Crimea.
2ª fase: La Guerra de Lombardía, 1859
En Plombiers se entrevistan en secreto Napoleon III y Camilo Benso para pactar el apoyo militar y diplomático en favor del piamonte en caso de conflicto. Piamonte invade Lombardía y derrota a los austriacos en Magenta y Solferino, obligándoles a retirarse del Milanesado. El plan era avanzar hacia Venecia, pero antes de entrar en el Véneto, Napoleón III firma unilateralmente el armisticio de Villafanca con los austriacos y deja a Cavour solo que tiene que renunciar a la segunda parte de su proyecto.
3ª fase: Incorporaciones de 1860
Se negocia con Francia para que los Estados Pontificios, protegidos por Francia desde 1848, cedan la Romaña y Legaciones al Piamonte a cambio de la cesión de Piamonte de Niza a Francia. Al mismo tiempo una serie de plebiscitos en Toscana, Parma y Módena confirman la unión con el Piamonte.El sur parece un poco más complicado. Garibaldi organiza un ejército de filibusteros, los Mil Casacas Rojas, con médicos, intelectuales periodistas, abogados... que engrosan las filas. La expedición sale de Génova en una flota y han de enfrentarse a un ejército regular y al rechazo de la población existente en la zona. No obstante derrotan al reino de las Dos Sicilias. Tras la ocupación Garibaldi se resiste a la unión con la monarquía piamontesa y Cavour tiene que cruzar los Estados Pontificios y derrotar a Garibaldi y así unificar el norte con el Sure. Quedan fuera del nuevo Estado el Lazio y el Véneto. En 1861 se reúne en Turín un Parlamento que proclama a Victor Manuel rey de Italia. Ese mismo año muere Cavour y la unificación se frena.
4ª fase: Últimas anexiones
En 1866 se produce la guerra Austro-Prusiana en la que interviene Italia del lado alemán. Aunque salen derrotados en las batallas de Custozza y Lissa,la derrota austriaca permite la incorporación del Véneto a la nueva nación italiana.
Solo queda Roma por unir al territorio del nuevo Estado. La derrota francesa en la Guerra Franco-Prusiana deja abiertas las puertas de la Ciudad Eterna y el general Cardona la ocupa y anexiona a italia. Se convierte en la capital, se culmina el proceso unificador no sin antes el rey Victor Manuel pedir al Parlamento que vote la Ley de Garantías, por la que se regula el estatuto de la Santa Sede, nuevo estado de la Iglesia adherido únicamente al territorio de la colina vaticana, se le reconoce al Papa la calificación de soberano, la inviolabilidad de la persona que dirige el Papado y la garantía de libre acceso a los Concilios católicos.
Los efectos porsitivos de la unificación son la unidad del sistema arancelario, del código penal y de la la moneda, la lira italiana. Pero también supone salvar importantes problemas como las enormes diferencias entre un norte industrializado, desarrollado, moderno, rico y supoerpoblado y un sur agrario, con escasez de población e ínfimas infraestructuras. Además la entrada violenta en Roma supone el rechazo de algunos sectores católicos de la nueva Italia laica. Frente a la idea de Risorgimento de una patria grande encontramos lam realidad de una nación débil, que llega tarde a al industrialización y al reparto imperialista del mundo.